La industria de cómic se ha consolidado como una de las más grande del sector del entretenimiento. De hecho, las dos principales empresas de cómics, DC Comics y Marvel, son dos grandes empresas que han sabido ampliar su campo de acción y son más que cómics. Además, que son filiales de los dos titanes del entretenimiento que son Disney y Warner (actualmente denominada Warner Bros. Discovery).
En la entrada anterior comenzamos a conocer la rama de la propiedad intelectual, la cual tiene por finalidad proteger a los creativos e innovadores, otorgándoles la exclusividad en el uso y comercialización de sus creaciones. Además, también en la entrada anterior nos comenzamos a conocer la figura del derecho de autor, una rama de la propiedad intelectual que se encarga de proteger al autor o creador de una obra determinada, otorgándole derechos morales y patrimoniales sobre la obra.
Las obras que pueden ser objeto de a protección del derecho de autor son variadas, desde libros y obras musicales, pasando por pinturas, esculturas y films, series de tv, obras de teatro entre otras. También conocimos que los cómics pueden ser protegidos tanto como obras visuales o como obras literarias, dependiendo del elemento predominante en la historieta.
Así que continuemos conociendo más sobre la relación entre los cómics y la propiedad intelectual.
EL DOMINIO PÚBLICO DE LOS DERECHOS DE AUTOR DE LOS CÓMICS
Una de las principales características del derecho de autor es que los derechos patrimoniales tienen un periodo de duración de mínima de 50 o más años después del fallecimiento del autor. En este contexto, en Estados Unidos y en los países miembros de la Unión Europea la duración de los derechos de autor tienen una duración de toda la vida del autor más 70 años después de su fallecimiento.
Una vez cumplido el mencionado término, la obra pasa a dominio público, lo que significa que la obra puede ser usada por terceras personas sin autorización del titular de los derechos de autor.
.Ahora bien, varias historietas publicadas en los años 30, es decir, durante la Edad Dorada del Cómic, ya han quedado bajo dominio público. Pero los cómics más relevantes para la industria, es decir, aquellos donde por primera vez aparecieron los personajes que han marcado la industria de las historietas, ya se van acercando a caer en el dominio público, lo cual sin duda ya está planteando dudas en relación a los celebres personajes que hicieron su debut.
Y es que en 2034 entrará en dominio público la primera edición de Action Comics, historieta en donde apareció por primera vez Superman. Por su parte, la primera edición de Batman entra en dominio público en 2035 y la primera aparición de La Mujer Maravilla entra en dominio público en 2037. Estos tres personajes son las joyas de la corona de DC Comics y, por lo tanto, de Warner Bros. Discovery.
En este sentido, es preciso indicar que el hecho de que las primeras ediciones de Superman, Batman y La Mujer Maravilla estén por caer en dominio público no quiere decir que la concepción de los personajes tal como los conocemos va a poder ser usada por todo el mundo, sino que la forma en la que apareció el personaje en el cómic es la que quedará bajo dominio público.
Por ejemplo, Superman en su primera edición no tenía el poder de volar, por lo que el personaje fue teniendo cambios o nuevas versiones, las cuales se encuentran protegidas bajo el derecho de autor por ser derivados de una obra.
Pero es interesante resaltar que los personajes mencionados anteriormente son los que entrarán en dominio público prontamente, ya que una muchos personajes emblemáticos de la industria como Iron Man, Flash, Spider Man, los X-Men, entre otros fueron publicados a partir de la década de los 60. Por lo tanto, sus primeras ediciones estarán protegidas por el derecho de autor durante un largo tiempo.
PROTECCIÓN DE LOS PERSONAJES DE CÓMICS BAJO EL DERECHO DE AUTOR
Ahora bien, en relación a los personajes de los cómics, la normativa de derecho de autor de Estados Unidos no resulta clara debido a que no hay una disposición en relación a la protección de los personajes de una obra literaria. Además, la interpretación que los tribunales estadounidenses han hecho de las normativa de derecho de autor sobre los personajes, generalmente, los han considerado como parte de una obra y no como una creación independiente, por lo que la protección de la obra se extiende a todos sus elementos.
Sin embargo, los personajes de un cómic pueden alcanzar elementos que los hacen por sí mismos originales, por lo que en esos casos, el personaje es una obra es protegido por el derecho de autor, tal como se vio en el caso DC Comics vs Towle, en el cual el Tribunal del caso consideró que el Batimovil es un personaje protegido por el derecho de autor.
Puede decirse que los personajes son los elementos más relevantes de la industria del cómic, ya que la fama que logran puede trascender la trama de la historieta o las historietas donde han aparecido. Por ello, los personajes de los cómic son los activos más importantes de las empresas como DC Comics y Marvel.
Desde los inicios de la industria del cómic tal como la conocemos sabe la importancia que el derecho de autor en la protección de sus historietas, sin embargo, también se ha visto envuelta en la polémicas relacionadas con esta figura. Como ya se ha dicho, uno de los primeros pleitos más mediáticos de esta industria en relación al derecho de autor, tal como sucedió con los derechos de autor de Superman.
En ese caso, Joe Shuster y Jerry Siegel, los creadores de Superman demandaron a DC Comics solicitando su reconocimiento como autores del personaje y el pago por todo lo generado por Superman. Las partes llegaron a un acuerdo, sin embargo, los herederos de los creadores del Hombre de Acero buscaron recuperar los derechos de autor de carácter patrimonial sobre los personajes, embarcándose en una batalla jurídica contra DC Comics (y en consecuencia Warner), aunque finalmente DC ganó el pleito.
Además, Marvel no escapa de estos pleitos, ya que se encuentra en un enfrentamiento legal con los herederos de Stan Lee, Steve Ditko y Gene Colan, para evitar que los derechos de autor sobre Iron Man, Spider Man, Dr. Srange, Ant Man, Hawkeye, Black Widow, Falcon, Thor, entre otros regresen a los herederos de sus autores, y por ende Marvel tenga que compartir las ganancias que generan estos personajes.
Estos personajes, como ya se ha visto, se vuelven en iconos y sus imágenes generan admiración y ganancias económicas. Esto ya pone a los personajes de los cómics en otra área de la propiedad intelectual que es la marca. Así que comencemos a ahondar en esta figura.
¿QUÉ ES UNA MARCA?
Ahora bien, una marca es un signo que distingue un producto o servicio de aquellos que ofrece otra empresa, esto con la finalidad de que el público o consumidor sepa el origen empresarial del producto o servicio que va a adquirir y de esa manera se evita la confusión en relación al momento de adquirir un producto.
Para que la protección de una marca sea eficaz, el signo que se desea usar comercialmente debe ser registrado como marca, dándole a su titular la exclusividad en el uso comercial del signo. Es preciso indicar que la protección de marcas es un tema territorial, es decir que la protección de una marca registrada en un país determinado no se extiende a otro país.
En este sentido, para que un signo sea considerado una marca, el mismo debe cumplir con una serie de requerimientos, siendo el más importante el requisito de la distintividad. La distintividad es la cualidad que tiene un signo para servir como indicador del origen empresarial de un producto.
Los signos que cumplen con dicha cualidad son aquellos que no se confunden con los productos o servicios que identifica, o sea, que no sean descriptivos, indicadores de alguna cualidad del producto, o que se trate de un término que sea de uso común en relación al producto.
Por lo tanto, denominaciones del producto o servicio, los que indiquen partes o propiedades del producto o palabras que sean de uso común para referirse al producto.
En este sentido, todo signo que sea puesto en el comercio es una marca. Y como se ha visto en líneas anteriores, los personajes de cómics tienen el potencial de convertirse en marcas comerciales bastante valiosas, ya que los seguidores de los cómics.
Las imágenes de superhéroes como Superman, Batman, La Mujer Maravilla, Spider Man, X-Men, Iron Man, Thor, Hulk, Capitán América y muchos otros, las vemos en diferentes productos, desde prendas de vestir, juguetes, objetos para la casa, entre muchos. Por lo tanto, estos héroes se han convertido en signos distintivos de los productos o servicios de Marvel (filial de Disney) y de DC Comics (filial de Warner Bros. Discovery).
Por lo tanto, en los personajes de cómics se presenta lo que se conoce como overlapping, esto significa que en una figura como Superman coexisten las figuras del derecho de autor y la de los cómics. Eso sí cada figura tiene una finalidad diferente.
En una próxima entrada continuaremos conociendo más sobre las marcas y el derecho de autor en los cómics.
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¿CÓMO PROTEGER UN PERSONAJE DE COMIC?
EL COMIC: PROBLEMAS JURIDICOS.
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