Los cómics sin duda se han convertido en un medio de expresión y entretenimiento. De hecho, la popularidad de los cómics es tal que ya no solamente consisten en revistas gráficas, sino que han surgido novelas gráficas, obras donde se desarrolla un tema con la densidad de una novela, pero aplicando las características del cómics. Entre las novelas gráficas más destacadas se encuentran V for Vendetta y Persepolis, esta ultima tiene carácter autobiográfico.
Ahora bien, en los primeros años del desarrollo de la industria, el cómic no era considerado una forma de arte como tal, por lo que la protección del derecho de autor sobre los cómics en esa época no era un tema prioritario para los creadores. En consecuencia, los creadores de cómics vendían sus derechos sobre los cómics por cifras irrisorias.
Sin embargo, al hacerse los cómics tan famosos, los creadores vieron que sus obras estaban generando grandes ingresos y que contaban con una gran cantidad de seguidores.
Ahora bien, Superman puede ser considerado como el personaje que dio inicio a lo que ha sido la fiebre por los héroes de los cómics y el que generó toda una estrategia de marketing que ha sido seguida en la actualidad. En este sentido, los creadores de Superman, Jerry Siegel y Joe Shuster, presentaron la que quizás sea la primera demanda de alto perfil de la historia del cómic. Un enfrentamiento que duró décadas y que posteriormente continuaron sus respectivos herederos.
Lo que dio origen a que los creadores de cómics no desestimaran sus creaciones, por lo que surgieron más demandas de los creadores contra las empresas editoras, cuya reputación se ha visto empañada por el trato que han dado a sus creativos.
En consecuencia, los creativos ya han encontrado nuevas maneras de hacer públicas sus creaciones sin necesidad de ceder sus derechos. Así que conozcamos esta evolución en la protección de los derechos de autor de los creadores de cómics.
LOS INICIOS DE LA INDUSTRIA DEL CÓMIC Y EL DERECHO DE AUTOR
Ahora bien, durante la década de los 30, en la cual estaba surgiendo esta industria, la misma no era considerada como una forma de arte, ni siquiera por los propios creadores, quienes, generalmente, eran jóvenes de clase trabajadora, hijo de inmigrantes. En este sentido, tanto los creadores de cómics como las empresas que estaban surgiendo en la época como los creadores de cómics no tenían la visión de estar creando una obra con mérito artístico, sino que la trataban más como algo comercial.
En consecuencia, los artistas cedían sus derechos de autor a cambio de sumas de dinero modestas para la publicación de los cómics. Generalmente los contratos de la cesión de los derechos de los cómics eran prácticamente de adhesión, ya que las empresas establecía todas las condiciones del mismo.
Superman fue lanzado a finales de la década de los 30, y para el año 1941, el personaje ya había generado más de 1 millón de dólares para la empresa editorial, pero los creadores no vieron un centavo. En consecuencia, Siegel y Shuster presentaron demanda contra la empresa editorial (la futura DC Comics).Sin embargo, las partes llegaron a un acuerdo que permitió ponerle fin al pleito.
A pesar de las condiciones de trabajo de la época, varios colegas de Siegel y Shuster tomaron el ejemplo de lo que pasó con los creadores de Superman para una mejor negociación de sus derechos.
Uno de ellos fue Will Eisner, una de las mentes más relevantes del cómics, quien para evitar verse en una situación similar a la de Siegel y Shuster, logró negociar con al empresa editorial que lo publicó, un acuerdo mediante el cual el registro de su obra se haría a nombre de la empresa, pero al disolverse la relación laboral los derechos de las obras regresaría a Eisner. De esta manera, Will Eisner logró conservar la titularidad de su cómic más relevante The Spirit.
LOS DERECHOS DE AUTOR DE CAPITÁN AMÉRICA
Otro personaje emblemático de la Edad Dorada de los Cómics es Capitán América, que al igual que Superman, era representante de los valores estadounidenses y del bien. Por lo que no es de extrañar que haya alcanzado relevancia en la época de la Segunda Guerra Mundial el Capitán América se volviera popular.
Ahora bien, Capitán América fue creado por Joe Simon y Jack Kirby, quienes vendieron los derechos del personajes a la empresa Timely Comics, actualmente denominada Marvel. En el acuerdo que las partes suscribieron fue establecido que a los autores se les pagaría el 25% de las ventas generadas.
El primer número de Capitán América vendió 1 millón de copias. Pero el pago que les hizo la empresa fue mucho menos de lo esperado por las deducciones que hizo.
Esto hizo que Simon y Kirby se fueran a la empresa rival DC Comics. Pero cuando dejaron Marvel, ambos acordaron, oralmente, darle a Marvel todos los derechos de Capitán América. A pesar de que Simon y Kirby lograron mejores condiciones de pago en DC, al final ambos quedaron decepcionados con la industria del cómic debido a que debieron renunciar a la propiedad intelectual sobre sus personajes.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial la popularidad de los cómics de superhéroes comenzó a disminuir. Por lo que Simon y Kirby inventaron un nuevo genero: los cómics de romance, los cuales iban dirigidos a una audiencia femenina y más adulta.
En este sentido, ambos autores fueron contratados por la editorial Crestwood Publications, la cual lanzó Young Romance, que se convirtió en un éxito absoluto. Con Crestwood Publication Kirby y Simon lograron negociar el 50% de lo generado por los cómics.
.Aunque Simon y Kirby continuaron trabajando bajo la modalidad freelancing para las empresas de cómics, ambos manifestaron su decepción por la forma en la cual se conducía la industria.
BOB KANE Y LOS DERECHOS DE BATMAN
